martes, 23 de noviembre de 2010

José María Milagro-Artieda. Aguas

Aguas

Venid, aguas del día; no hay remedio
al quebrado suspiro de la muerte.
Sabréis lavar el ceño de las horas.

Llegad con paso tenue desde lentas cornisas,
cansadla con dedos de melaza.

La blanda distracción, el punto horrible
en que embiste la fuerte y todo cesa.

Si algo nace después, que escape
largo al jadeo trastornado,
que no vuele en el círculo de restos,
que no se estanque más.

Vienen las aguas rotas a caer
desde el mismo registro de la espera.

Ya las sopesa el hombre. Se demora,
fracción de su congoja envuelta en ramos,
ahuyenta los temblores y su losa. 

Dejad de respirar, aguas dolidas,
nada os detiene aquí. Tantas preguntas
para el légamo pasado y yo sin sombra.

3 comentarios:

  1. Muchas gracias por la publicación. Todo está bien, salvo que mi nombre completo es
    JOSÉ MARÍA MILAGRO-ARTIEDA.
    ¿Podríais modificarlo, por favor?

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  2. Por cierto: si soy tan curiosos como yo y cuando os interesa un poema buscáis información sobre su autor (cosa que suelo hacer) mi blog es: www.milagro-artieda.blogspot.com. También podéis encontrarlo en San Google buscando "el mejor escritor desconocido" o simplemente mi nombre.
    No hay de qué.

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